Conocido como el centro financiero de la capital, este distrito se ha convertido en un importante eje turístico y de negocios, con centros empresariales, hoteles y restaurantes. Se caracteriza por sus áreas verdes y posee una gran actividad cultural, con varios teatros, galerías de arte, librerías y casas de cultura.
El distrito de San Isidro fue creado por un decreto ley en abril de 1931, siendo su primer alcalde el Dr. Alfredo A. Parodi, y se constituyó en base a parte de la hacienda El Olivar y a las urbanizaciones de Orrantia y Country Club.